EMPATÍA Y ESCUCHA. Calidad humana, trato agradable; hace pensar de manera no intrusiva. Sentido del humor, gran respeto por el cliente, sencillez y amabilidad en el trato
Afronta sus procesos con un método claro que da mucha seguridad al cliente. Sabe cómo potenciar las virtudes de las personas y minimizar sus defectos. Se compromete con un plan de trabajo y lo defiende tenazmente.
Sólidas formación y experiencia. Su base científica de la psicología potencia drásticamente su método. Aprende nuevas cosas constantemente.
Trabaja rápido, de modo creativo y profesional. Rapidez de análisis de la situación y comprensión de las situaciones Sinceridad, limpieza, eficacia.
Se adapta a las necesidades del cliente en una variedad de campos y problemáticas. Se acomoda a su estilo y ritmo para que el proceso fluya suave. Jugadora de equipo.
Detecta ágilmente las áreas de mejora donde hay que poner el foco. Hace unos certeros y rápidos análisis de la situación del cliente, y síntesis de lo importante. Capacidad de mirar con profundidad y de ver con precisión. Ve más allá de la superficie de los problemas. Muy perceptiva. Simultáneas atención a los detalles y matices, y una clara visión global de las cosas.
Con ella se sabe que se va a cumplir el objetivo. Normalmente antes de lo que esperas, y con añadidos tangibles sustanciosos con los que no contabas. Potente capacidad de resolución a corto y a largo plazo
Buena comunicadora. Explica muy bien los procesos psicológicos de las personas. Perceptiva. Comunicación franca y agradable que facilita mucho el proceso
Mueve a la acción, despertando en el cliente positividad, alegría y esperanza, una actitud de «yo puedo y va a ser fácil». Dinámica. Desprende y transmite una gran energía